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13 de febrero de 2023

Cómo las olas de calor facilitan los incendios forestales

Ola de calor incendios forestales

Las olas de calor, la sequía y el viento especialmente provocan que los incendios forestales sean cada vez más destructivos y difíciles de controlar.

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Debido al cambio climático, los episodios de sequía, las altas temperaturas y la baja humedad son más frecuentes y extremos. Estos fenómenos meteorológicos no solo tienen importantes impactos en la sociedad, sino que también elevan el riesgo de incendios forestalesEn esta nota te explicamos cómo las olas de calor, las sequías y el viento facilitan los incendios forestales.

Cómo las olas de calor facilitan los incendios forestales

Hay tres factores principales que elevan el riesgo de los incendios forestales y favorecen su propagación a otras zonas: la baja humedad relativa, las  altas temperaturas y el fuerte viento. 

La humedad del combustible depende de la lluvia y el calor. Si el paisaje está húmedo baja la probabilidad de haya incendios considerablemente, en cambio si está seco es más inflamble.

El cambio climático influye de forma directa en esto. El aumento de las olas de calor, junto con la sequía y los cambios de uso de la tierra reducen la humedad del combustible.

De esta forma, según indica el Grupo Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC), el riesgo de incendios aumenta, junto con la duración de estos y la probabilidad de que sean más grandes.

Además de las altas temperaturas y la sequía, el cambio climático también aumenta los fenómenos extremos como los vientos elevados y cálidos,  provocando que los incendios sean más intensos y más severos.

Estos fenómenos hacen que cada vez seamos más proclives a sufrir eventos de incendios extremos o megaincendios. De hecho, durante las últimas décadas los incendios forestales han sido extremadamente destructivos y difíciles de controlar.

«Cada vez tenemos veranos más intensos en términos de temperatura y viento. Tenemos condiciones de sequía estructurales hace casi 15 años y  lluvias invernales que generan crecimiento de la vegetación, que luego se seca muy rápido. Tenemos una cantidad de material disponible que es muy propenso a quemarse de manera rápida y violenta«, señala Víctor Orellana, ex subdirector de la Onemi y consultor en gestión de riesgos.

Botón rojo

Los cambios en las condiciones meteorológicas propicias a incendios se pueden medir utilizando índices de pirometeorología (en inglés fire weather indexes). Estos clasifican el nivel de riesgo de incendios forestales bajo un conjunto dado de condiciones atmosféricas (temperatura, humedad, lluvia y viento). En Chile se utiliza el Botón Rojo

«Es un sistema tecnológico que utiliza la entidad para predecir aquellas áreas donde podría haber un incendio y que ese incendio se transforme de magnitud», indica el director ejecutivo de Conaf, Christian Little.

Lee también: Incendios forestales en Chile: El mapa de los focos activos

Cómo prevenir un incendio en una ola de calor

Frente a las olas de calor que azotan la zona centro y sur del país, el Botón Rojo busca evitar que se realicen conductas de riesgos que pueden generar algún incendio.

  • Suspender las labores al aire libre en horas de calor extremo (entre las 14 y las 18 de las hrs.). Faenas y maquinarias agrícola, galleteros o soldaduras generan chispas que pueden provocar un incendio.
  • No se debe prender nada de fuego. No está permitido la quema de basura, ni la quema agrícola, es un delito que se castiga con pena de cárcel a quien incurra en ello.
  • Tampoco hay que dejar que niños jueguen con fósforos.
  • Para sortear las olas de calor, utilizar ventiladores y aires acondicionados certificados para evitar un corto circuitos, apagones e incendios  dentro de los hogares.

 

 

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